Hoy vamos a hacer una reflexión basándonos en dos modelos de negocios exitosos de Murcia: “La Niña del Sur” dirigida por Juan Antonio Baños y “Tessai” dirigida por Antonia Griñán, 2 empresarios que empezaron de la nada y han llegado muy lejos.
Juan Antonio es director de la empresa de alimentos congelados “La Niña del Sur”. Tal y como se presenta en su página web, es “una empresa familiar nacida hace más de treinta años al calor de un humilde horno de pan” y que es a día de hoy líder en su sector. Quiero resaltar una palabra de esta definición que para mi es clave para entender el éxito profesional de Juan Antonio: “humilde”. Sí, es difícil de explicar, porque desafortunadamente es muy común en el panorama empresarial asociar poder profesional con arrogancia. Pues bien, en el caso de “La Niña del Sur” ocurre precisamente todo lo contrario; es una empresa puntera en su sector con un enorme potencial y, sin embargo, está dirigida por una familia unida, cercana, comprometida con la sociedad y nada pretenciosa. Yo tengo el placer y privilegio de dar clase de inglés a Juan Antonio y a su hijo Fulgencio, y he de decir que son unas personas con una calidad humana ejemplar y excepcional (¡además de ser unos muy buenos estudiantes of course!).
La niña del sur en el extranjero
Antonia ha recibido el premio “Empresaria de Año 2013” por su empresa “Tessai” de instalaciones eléctricas. Es una mujer valiente que al fallecer su marido se hizo cargo no solamente de su familia sino también del negocio familiar “por amor a su marido” como bien dice ella. Aparte de la valentía de Antonia para sacar adelante la empresa en una situación personal tan complicada, lo que más me ha llamado la atención es el hecho de que Antonia valora a sus trabajadores por encima de todo, tanto personal como profesionalmente, los cuales a su vez la han apoyado desde el primer momento para salir adelante. Para mí, esa es la clave de su éxito: el valorar a todos y cada uno de los miembros de la plantilla como un eslabón fundamental para el buen funcionamiento del negocio, el trabajo en equipo y el apoyo mutuo.
Y entonces: ¿cuál es realmente la clave del éxito de estos dos empresarios? ¿qué podemos hacer para llegar a ser como ellos? Pues bien, tras una meditada reflexión tengo el pleno convencimiento de que el éxito de estas dos empresas reside precisamente en la esencia y los valores humanos de las personas que las dirigen, por supuesto sin negar el trabajo duro y la constancia de estas dos “grandes figuras”, creando de este modo una perfecta harmonía en las relaciones personales y laborales que se traduce en un rotundo e indiscutible éxito empresarial.
En definitiva, Juan Antonio y Antonia son dos personas admirables de las que queremos aprender e imitar para poder aspirar en un futuro a llegar a ser lo que ellos ya han conseguido: gente humilde y respetada con una gran calidad humana y una empresa de 10. Que suerte que tenemos en conocerlos a ambos y poder imitarlos aunque sea un poquito en nuestro servicio de idiomas
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